sábado, 31 de diciembre de 2011

Sobre el inventario

La auditoría del libro de cuentas del ayuntamiento de la ciudad de provincias no dejó lugar a dudas,  iban a empezar el año en una situación de quiebra total.

En las maltrechas arcas municipales quedaban:

Un señor que quiere mover su caravana pero no logra arrancar el quitanieves.

Un camping de tercera categoría que merecería ser de cuarta.

Una ola de frío que no remite.

Un marino mutilado que no quiere olvidar ni puede pescar, o la inversa.

Una farera que no ilumina.

Un ilusionista huido de la justicia.

Un aviador muerto cuando iba a dejar el trabajo.

Una enfermera que perdió tres chicles pero gano uno rosa.

Una cadena estadounidense de comida rápida en posición de monopolio.

Un ansia de pollo que no cesa.

Una ciudad manchega que dio ejemplo de cómo resistir a los maniacos.

Una recepción diplomática que acabó, como viene siendo costumbre, en un baño de sangre.

Una empleada de correos con sellos nuevos.

Un sistema de reparto de congelados controlado por transportistas piratas.

Un gremlin que espera la cabalgata de reyes comiéndose los caramelos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario